¿POR QUÉ CAMBIAR

“Cuando no somos capaces de cambiar una situación, nos enfrentamos al reto de cambiar nosotros mismos” (Viktor Frankl)

Desde el comienzo de la vida, en el vientre materno se producen cambios. Un huevo o cigoto, se transforma en embrión y luego en feto. Durante ese proceso de cambio, la vida fetal depende de la madre y de ciertos acontecimientos internos o externos, que pueden alterar el curso de la gestación.

Cuando llega el momento del nacimiento, el feto enfrenta dificultades durante la travesía del túnel pelviano, una cavidad ósea, dura, oscura y estrecha; que solo se puede vencer si el feto logra cambiar su posición, moldear su cabeza y su cuerpo para adaptarse al medio, única forma de salir con vida, de lo contrario quedaría atrapado en el canal pélvico con riesgo a morir o poner en peligro la vida de su madre. Cuando al final logra salir de aquel oscuro túnel, llorar es el resultado del logro alcanzado y el alivio al estrés sufrido. Todo logro en la vida tiene un precio, y el precio es cambiar.

Después del nacimiento y en el transcurso de los años tendremos que recorrer el camino de la vida y enfrentarnos a nuevos cambios, cambios que son necesarios para crecer y avanzar, pero en cada etapa pueden suceder hechos inesperados, y a veces dolorosos, que quizás nos generen incertidumbre, que algunas veces no queremos o no sabemos cómo afrontarlos, pero si no intentamos cambiar y adaptarnos al entorno, la vida se nos hace cuesta arriba. Todo cambio genera miedo, pero de una manera u otra tendremos que hacerlo. No cambiar es estancarse en el tiempo y no poder avanzar.

A veces nos resistimos al cambio, porque tenemos miedo a perder nuestra área de confort donde nos encontramos, a no saber qué hacer si decidimos cambiar, o bien implica decir adiós a otros momentos que ya no volverán, y aunque hayan sido malos momentos tuvieron un gran significado en nuestra vida. Lo que hagas ahora será lo que tendrás mañana, nos guste o no, la vida nos hará cambiar. Nunca es tarde para lograr un cambio..

“Quería cambiar el mundo, pero he descubierto que lo único que uno puede estar seguro de cambiar, es a uno mismo” Aldous Huxley